En más de una ocasión, escuchaste o leíste sobre el daño que causamos al consumir muchos plásticos desechables y a dónde va a parar tanta basura. Sí, es cierto, llega a los océanos, pero tal vez no conocemos realmente todo el viaje que realiza nuestra basura. ¿Sabías que la basura no se queda en los océanos, sino que parte de ella regresa a nosotros de una forma u otra?
Si probablemente ya sabías que la basura regresa a nosotros ingiriéndola al comerla o al beberla, pues bien, sabes la importancia de reducir el consumo de plásticos desechables; si de lo contrario no lo sabías, pues en esta nueva nota explico cuál es el camino que nuestra basura recorre, de qué forma llega a nosotros y los posibles problemas para la salud humana.
Comencemos por cómo la desechas, ¿la pones en un tacho de basura o la dejas en cualquier otro lugar? Si la desechas en un contenedor, la basura irá a parar o bien a un vertedero (disposición de la basura al aire libre) o a un relleno sanitario (método para depositar y compactar los desechos sólidos enterrados en el suelo), dependiendo lo que tenga el lugar en dónde vivas; si de lo contrario la dejas en cualquier otro lugar que no sea un contenedor, los desechos irán a parar a las alcantarillas, ríos e incluso ecosistemas terrestres, como lo son bosques y parques. ¿Recuerdas todas esas veces en las que te repetían que la mejor solución es reducir el consumo de plástico? Pues, es porque no importa si tu basura la pones dentro o fuera de un tacho, las posibilidades de que lleguen al océano son muy altas porque 1) no todos los lugares del mundo cuentan con un relleno sanitario, es decir que la basura de los tachos pasa a vertederos que igual terminará llegando a algún cuerpo de agua y 2) los rellenos sanitarios también contaminan tanto el suelo como el agua porque los plásticos desprenden químicos que la tierra absorberá y transportará a otros lugares (Sí, ya hablamos de químicos, un tema más alarmante).
Al final ocurren dos posibles caminos: 1) la basura se mantiene en tamaños grandes, los animales marinos se la comen y mueren por la ingesta de esta, o 2) la basura se fragmenta, el zooplancton, siendo un integrante elemental de la cadena trófica, se alimenta de estos desechos, los peces más pequeños se alimentan de zooplancton, los peces más grandes se comerán a los peces más pequeños y moluscos y, ¿adivina quién se terminará comiendo un montón de mariscos llenos de plásticos y químicos tóxicos? Pista: comienza con H y termina con UMANOS.
Entonces, ya conoces su recorrido y la forma en la que regresa a nosotros. OJO: Cabe recalcar, que la basura también regresa por el agua que usas para bañarte, lavar tus alimentos y el que usas para beber porque recuerda que no solo los océanos se ensucian, sino también el agua dulce que utilizamos.

Ahora bien, todavía no se ha comprobado en un 99,99% las consecuencias de los plásticos en nuestro organismo porque es un tema de investigación relativamente nuevo, pero te diré lo que sí se sabe:
- Los plásticos, una vez que se comienzan a fragmentar, son blancos fáciles para la adhesión de químicos tóxicos como los PCBs y PAHs (siglas en inglés) o la adhesión de metales pesados.
- Los peces que han ingerido plásticos tratados han sufrido más daños en el hígado que aquellos que consumieron plástico virgen. Un pez con hígado comprometido no puede metabolizar drogas, pesticidas y otros contaminantes.
- Estudios demuestran que las ostras que han estado expuestas a pedazos pequeños de poliestireno producen pocos huevos y menos movilidad del esperma.
- Se han estudiado a más de 114 especies y en todas se presentan daños en su organismo y salud.
- Es difícil conocer el daño exacto que causan los plásticos porque estos contienen pigmentos, estabilizadores ultravioletas, repelentes de agua, químicos como el BPA, suavizantes como los ftalatos.
- Se sabe que, dependiendo de la cantidad, el BPA y los ftalatos alteran la actividad estrogénica, es decir, aumentan o disminuyen la producción de estrógeno en hombres y mujeres.
- Los retardantes de llamas interfieren, probablemente, en el desarrollo del cerebro en fetos y bebés.
- Otros componentes pueden causar cáncer o defectos de nacimiento.
La lista continúa, pero imagínense, si en todas las especies estudiadas se han encontrado daños por la ingesta de plástico, ¿qué nos hace pensar que a nosotros no nos hará daño?
Sin embargo, es necesario repetir una vez más que existen soluciones para evitar todo esto, soluciones que las pueden encontrar en el post “ZERO WASTE” Y EL FRASCO DE MAYONESA y, recuerden, no todo está perdido si nos comprometemos y comenzamos a cambiar nuestros hábitos porque después de todo, no hay planeta B.